jueves 15 de setiembre de 2011
http://www.losandes.com.ar/notas/2011/9/15/declarada-emergencia-para-ganaderia-local-593692.asp
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Fue declarada la emergencia para la ganadería local
La dispuso la Nación. La medida alcanza a productores de secano de 13 departamentos.
La declaración es hasta el 31 de diciembre pero el ciclo productivo se extiende hasta marzo. (Los Andes)
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Diana Chiani - dchiani@losandes.com.ar
Aunque la geografía provincial ya está acostumbrada a que llueva poco, la escasez de precipitaciones de los últimos tiempos se ha sumado al bajo caudal de ríos y ha hecho mella en el sector de secano y en la ganadería que aquí se desarrolla. La situación no es nueva pero recién ayer el boletín oficial de la Nación publicó la declaración de emergencia agropecuaria por sequía para las explotaciones de ganado mayor y menor de diversas zonas de secano de la provincia.
Aunque la declaración es hasta el 31 de diciembre de este año, el texto contempla que es a fines de marzo próximo cuando finaliza el actual ciclo productivo en los departamentos de General Alvear, San Rafael, Malargüe, Santa Rosa, La Paz, Lavalle, Las Heras, Luján de Cuyo, Tunuyán, Tupungato, San Carlos, Rivadavia y San Martín.
La observación se debe a que al secano le cuesta volver a lo que era después varios meses sin agua. "En las zonas áridas, los problemas de sequía afectan rápidamente a la flora natural y, en contrapartida. su recuperación es más lenta", explicó Raúl Millán, subsecretario de Programación Agroalimentaria y Gestión de Calidad del Ministerio de Producción. Por este motivo, suelen darse prórrogas de 180 días a la recuperación de la emergencia. Si comenzara a llover ahora, los arbustos y pasturas tardarían al menos todo ese tiempo en reverdecer.
La oficialización por parte de la crisis (que tiene unos dos años) que atraviesa la ganadería local se suma a dos decretos provinciales que, en 2010, también declararon la emergencia por la sequía. Este fenómeno no sólo ha diezmado a al ganado bovino, ovino y caprino sino que también ha afectado al sector apícola que se desarrolla en el secano local de manera prácticamente nómade.
Concretamente, la emergencia a nivel nacional -que se enmarca dentro de la ley 26.509- dispara organismos administrativos para poder asistir a los productores; en especial a los pequeños. De este modo, la reglamentación publicada ayer establece que las personas afectadas tendrán la posibilidad de posponer sus pagos a entidades bancarias, AFIPu organismos similares; de acuerdo lo indica la 26.509. Los "beneficios" se podrán hacer presentando certificados extendido por la autoridad competente de la provincia, en el que conste que sus predios o explotaciones se encuentran comprendidos en los casos previstos en dicho artículo.
La ley nacional contempla la declaración de la emergencia ante diversos fenómenos climáticos y la sequía no es la excepción. Antes del pronunciamiento nacional, Mendoza presentó la situación en la comisión nacional de emergencias y desastres agropecuarios que se realizó en agosto. En este contexto, y de acuerdo con Raúl Millán, la provincia ha pedido recursos por 8 millones de pesos.
El destino concreto de ese dinero se terminará de evaluar la semana que viene, cuando se reúna la mesa ganadera local. No obstante, lo más probable es que vaya a sostener a los más pequeños.
Mario Leiva, productor del Valle de Uco, comentó que la declaración de la emergencia es una ayuda concreta en lo que obligaciones impositivas y vinculadas con la producción ganadera respecta. En tanto, otro productor de General Alvear opinó las medidas debieran haberse hecho antes y de manera más clara y concisa.
Antes del pronunciamiento nacional, el gobierno local había estado distribuyendo fardos de alfalfa a productores de ganado caprino y ovino. "Tanto los productores como los animales son los más vulnerables", sostuvo Millán y agregó que a partir de la declaración de emergencia local, también se asistió a los productores apícolas con dos kilos de azúcar no ya no para sostener la producción sino con el objetivo de que la población de las colmenas continúe con vida.
El futuro de los campos ganaderos de Mendoza es incierto por lo que los mismos están en constante evaluación. Hasta el momento, la pérdida de animales en la provincia ha sido importante y es difícil que la tendencia cambie. Por este motivo, es probable que después de diciembre se trate de prorrogar la emergencia.
Aunque la declaración es hasta el 31 de diciembre de este año, el texto contempla que es a fines de marzo próximo cuando finaliza el actual ciclo productivo en los departamentos de General Alvear, San Rafael, Malargüe, Santa Rosa, La Paz, Lavalle, Las Heras, Luján de Cuyo, Tunuyán, Tupungato, San Carlos, Rivadavia y San Martín.
La observación se debe a que al secano le cuesta volver a lo que era después varios meses sin agua. "En las zonas áridas, los problemas de sequía afectan rápidamente a la flora natural y, en contrapartida. su recuperación es más lenta", explicó Raúl Millán, subsecretario de Programación Agroalimentaria y Gestión de Calidad del Ministerio de Producción. Por este motivo, suelen darse prórrogas de 180 días a la recuperación de la emergencia. Si comenzara a llover ahora, los arbustos y pasturas tardarían al menos todo ese tiempo en reverdecer.
La oficialización por parte de la crisis (que tiene unos dos años) que atraviesa la ganadería local se suma a dos decretos provinciales que, en 2010, también declararon la emergencia por la sequía. Este fenómeno no sólo ha diezmado a al ganado bovino, ovino y caprino sino que también ha afectado al sector apícola que se desarrolla en el secano local de manera prácticamente nómade.
Concretamente, la emergencia a nivel nacional -que se enmarca dentro de la ley 26.509- dispara organismos administrativos para poder asistir a los productores; en especial a los pequeños. De este modo, la reglamentación publicada ayer establece que las personas afectadas tendrán la posibilidad de posponer sus pagos a entidades bancarias, AFIPu organismos similares; de acuerdo lo indica la 26.509. Los "beneficios" se podrán hacer presentando certificados extendido por la autoridad competente de la provincia, en el que conste que sus predios o explotaciones se encuentran comprendidos en los casos previstos en dicho artículo.
La ley nacional contempla la declaración de la emergencia ante diversos fenómenos climáticos y la sequía no es la excepción. Antes del pronunciamiento nacional, Mendoza presentó la situación en la comisión nacional de emergencias y desastres agropecuarios que se realizó en agosto. En este contexto, y de acuerdo con Raúl Millán, la provincia ha pedido recursos por 8 millones de pesos.
El destino concreto de ese dinero se terminará de evaluar la semana que viene, cuando se reúna la mesa ganadera local. No obstante, lo más probable es que vaya a sostener a los más pequeños.
Mario Leiva, productor del Valle de Uco, comentó que la declaración de la emergencia es una ayuda concreta en lo que obligaciones impositivas y vinculadas con la producción ganadera respecta. En tanto, otro productor de General Alvear opinó las medidas debieran haberse hecho antes y de manera más clara y concisa.
Antes del pronunciamiento nacional, el gobierno local había estado distribuyendo fardos de alfalfa a productores de ganado caprino y ovino. "Tanto los productores como los animales son los más vulnerables", sostuvo Millán y agregó que a partir de la declaración de emergencia local, también se asistió a los productores apícolas con dos kilos de azúcar no ya no para sostener la producción sino con el objetivo de que la población de las colmenas continúe con vida.
El futuro de los campos ganaderos de Mendoza es incierto por lo que los mismos están en constante evaluación. Hasta el momento, la pérdida de animales en la provincia ha sido importante y es difícil que la tendencia cambie. Por este motivo, es probable que después de diciembre se trate de prorrogar la emergencia.
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