domingo 4 de noviembre de 2012
http://www.lne.es/asturias/2012/11/04/abeja-endulza-crisis/1321570.html
«La abeja es probablemente el único socio del hombre que le proporciona beneficios sin exigirle nada a cambio. La abeja no nos pide nunca contrapartidas, ni trabajo, ni dividendos... lo hace ella todo». Es la reflexión de alguien que conoce bien el mundo empresarial, el presidente de Industrias Lácteas Asturianas (ILAS), Francisco Rodríguez, quien ayer ejerció de pregonero de la XVI Feria de la Miel de Boal.
Rodríguez destacó el fundamental papel de las abejas en la vida y repasó las incógnitas que aún rodean a estos insectos. Además se mostró crítico con quienes no tienen «la sensibilidad necesaria para intentar saber qué cosas comemos y cómo se producen». En este sentido, alabó la sabiduría de los «admirados paisanos de Serandinas o Miñagón que penetran en el trobo con ojos de espeleólogo y portando por toda arma defensiva un viejo botafumeiro».
El reconocido empresario lácteo repasó algunos datos del sector apícola como el hecho de que España cuenta con la cuarta parte de las colmenas de la UE, atendidas por un total de 30.000 apicultores. «Crece el número de mieleros mientras desciende el de vaqueros. Pronto habrá en España más colmenas que vacas y será necesario habilitar nuevos espacios para los cien mil millones de abejas que surcarán pronto nuestros campos. No tardaremos en producir cuarenta millones de litros de miel al año y ayudaremos con ello a los chinos a endulzarse la vida, que falta les hace».
Sobre el papel de la producción apícola también profundizó la consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos, María Jesús Álvarez, quien se muestra partidaria de impulsar una marca de calidad o una Identificación Geográfica Protegida (IGP) para la miel asturiana. Además considera fundamental mejorar el sector y las redes de comercialización, consciente de que la miel asturiana tiene una gran demanda en países europeos como Alemania. «Estamos exportando ya; pero con un sector productor más estructurado y más grande, se puede exportar más y por eso hay una vía de negocio que hay que trabajar», zanjó.
La feria boalesa cerrará hoy su vigésima sexta edición, una cita que de momento no entiende de crisis. Además este año la cosecha ha sido una de las mejores que se recuerdan. El portavoz de los apicultores boaleses es Julio Fernández, quien explica que en estas dos jornadas se comercializarán en Boal más de 2.000 kilos de miel, a un precio medio de entre 6 y 6,50 euros el kilo.
Actualmente en Boal hay alrededor de treinta productores profesionales. repartidos por diferentes rincones del concejo. El reto pendiente es profesionalizar el sector y lograr que se involucre más gente joven. En el acto inaugural de la feria también se entregó el premio «El Cortín», que reconoce a personas o entidades que trabajan en la promoción de la miel. En este caso el elegido fue el organizador de la feria apícola de Pastrana, en Guadalajara, José Luis Herguedas. Valoró el trabajo de los boaleses y destacó el buen momento de la feria, que «nada tiene que envidiar» a otras convocatorias similares que se celebran a lo largo del país.
Herguedas defendió el papel del apicultor como «conservador del medio» y pidió a la Administración más apoyo al sector apícola, que supone un complemento para muchas familias. Este experto apuesta por las marcas de calidad y «sobre todo» por «dedicar esfuerzo y atención a la comercialización» de los productos.
http://www.lne.es/asturias/2012/11/04/abeja-endulza-crisis/1321570.html
La abeja endulza la crisis
El empresario Francisco Rodríguez apuesta en Boal por el pujante sector de la miel, con productoras «que nunca piden dividendos»
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Boal, T. CASCUDO
«La abeja es probablemente el único socio del hombre que le proporciona beneficios sin exigirle nada a cambio. La abeja no nos pide nunca contrapartidas, ni trabajo, ni dividendos... lo hace ella todo». Es la reflexión de alguien que conoce bien el mundo empresarial, el presidente de Industrias Lácteas Asturianas (ILAS), Francisco Rodríguez, quien ayer ejerció de pregonero de la XVI Feria de la Miel de Boal.
Rodríguez destacó el fundamental papel de las abejas en la vida y repasó las incógnitas que aún rodean a estos insectos. Además se mostró crítico con quienes no tienen «la sensibilidad necesaria para intentar saber qué cosas comemos y cómo se producen». En este sentido, alabó la sabiduría de los «admirados paisanos de Serandinas o Miñagón que penetran en el trobo con ojos de espeleólogo y portando por toda arma defensiva un viejo botafumeiro».
El reconocido empresario lácteo repasó algunos datos del sector apícola como el hecho de que España cuenta con la cuarta parte de las colmenas de la UE, atendidas por un total de 30.000 apicultores. «Crece el número de mieleros mientras desciende el de vaqueros. Pronto habrá en España más colmenas que vacas y será necesario habilitar nuevos espacios para los cien mil millones de abejas que surcarán pronto nuestros campos. No tardaremos en producir cuarenta millones de litros de miel al año y ayudaremos con ello a los chinos a endulzarse la vida, que falta les hace».
Sobre el papel de la producción apícola también profundizó la consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos, María Jesús Álvarez, quien se muestra partidaria de impulsar una marca de calidad o una Identificación Geográfica Protegida (IGP) para la miel asturiana. Además considera fundamental mejorar el sector y las redes de comercialización, consciente de que la miel asturiana tiene una gran demanda en países europeos como Alemania. «Estamos exportando ya; pero con un sector productor más estructurado y más grande, se puede exportar más y por eso hay una vía de negocio que hay que trabajar», zanjó.
La feria boalesa cerrará hoy su vigésima sexta edición, una cita que de momento no entiende de crisis. Además este año la cosecha ha sido una de las mejores que se recuerdan. El portavoz de los apicultores boaleses es Julio Fernández, quien explica que en estas dos jornadas se comercializarán en Boal más de 2.000 kilos de miel, a un precio medio de entre 6 y 6,50 euros el kilo.
Actualmente en Boal hay alrededor de treinta productores profesionales. repartidos por diferentes rincones del concejo. El reto pendiente es profesionalizar el sector y lograr que se involucre más gente joven. En el acto inaugural de la feria también se entregó el premio «El Cortín», que reconoce a personas o entidades que trabajan en la promoción de la miel. En este caso el elegido fue el organizador de la feria apícola de Pastrana, en Guadalajara, José Luis Herguedas. Valoró el trabajo de los boaleses y destacó el buen momento de la feria, que «nada tiene que envidiar» a otras convocatorias similares que se celebran a lo largo del país.
Herguedas defendió el papel del apicultor como «conservador del medio» y pidió a la Administración más apoyo al sector apícola, que supone un complemento para muchas familias. Este experto apuesta por las marcas de calidad y «sobre todo» por «dedicar esfuerzo y atención a la comercialización» de los productos.
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