Vietnam. Aplicando tecnología digital para el desarrollo de la industria apícola
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Los científicos agrícolas creen que la disminución de las áreas forestales y de plantas con flores también provoca una escasez de fuentes de alimento para las abejas, lo que altera el desarrollo de las colonias y reduce la producción de miel. En este contexto, se hace necesario desarrollar y aplicar procesos apícolas modernos.
El Profesor Asociado, Dr. Pham Hong Thai, Director del Centro de Investigación de Abejas y Apicultura Tropical (Academia de Agricultura de Vietnam), capacitó en técnicas de apicultura a agricultores de muchas provincias y ciudades.
El Centro de Investigación y Apicultura de Abejas Tropicales (Academia de Agricultura de Vietnam) se especializa en la investigación y transferencia de procesos tecnológicos apícolas a apicultores de todo el país. Actualmente, el Centro desarrolla aplicaciones de gestión y trazabilidad para colonias de abejas, contribuyendo así a la investigación eficaz, la cría proactiva de abejas y la garantía de la calidad de los productos.
Esta no solo es la primera unidad en Vietnam en inseminar artificialmente con éxito abejas reinas, sino que también aplicó con éxito la tecnología 4.0 al proceso de cría de abejas para miel, creando una alta eficiencia económica en la explotación de la miel....
Sensores, IA, big data, sinergia con las renovables... La innovación da aire a unas explotaciones afectadas por el cambio climático y la competencia foránea En pleno siglo XXI, la apicultura es todavía una actividad apenas tecnificada que cuida de forma tradicional, con mimo y esmero, su principal activo: las colmenas de abejas que producen miel. Pero el sector vive los tres últimos aciagos con una caída drástica de la producción ... de casi el 20%. Las abejas son muy sensibles y están amenazadas por un cúmulo de factores como la sequía, las olas de calor, el exceso de lluvias... Perciben ya los efectos del cambio climático. A la vez sufren problemas sanitarios a causa la enfermedad denominada 'varroosis' y la presencia de especies exóticas invasoras (como la Vespa velutina). Y lo que más duele: cada vez importamos más miel extracomunitaria que no compite en igualdad de condiciones con los apicultores europeos y españoles. Procede de países con una regulación más laxa y se vende a precios más bajos. «Hay enfermedades en diferentes épocas del año que atacan a las abejas. Los apicultores españoles no pueden sanear sus colmenas con tratamientos eficientes porque transfieren esos medicamentos a la miel. Está prohibido, pero no en países como Argentina y China, cuyas mieles también se venden en Europa», explica Séneca Martín, coordinador del proyecto de investigación Innomiel y CEO de Dinámica de Masas, una empresa de tecnología....
Sensores, IA, big data, sinergia con las renovables... La innovación da aire a unas explotaciones afectadas por el cambio climático y la competencia foránea En pleno siglo XXI, la apicultura es todavía una actividad apenas tecnificada que cuida de forma tradicional, con mimo y esmero, su principal activo: las colmenas de abejas que producen miel. Pero el sector vive los tres últimos aciagos con una caída drástica de la producción ... de casi el 20%. Las abejas son muy sensibles y están amenazadas por un cúmulo de factores como la sequía, las olas de calor, el exceso de lluvias... Perciben ya los efectos del cambio climático. A la vez sufren problemas sanitarios a causa la enfermedad denominada 'varroosis' y la presencia de especies exóticas invasoras (como la Vespa velutina). Y lo que más duele: cada vez importamos más miel extracomunitaria que no compite en igualdad de condiciones con los apicultores europeos y españoles. Procede de países con una regulación más laxa y se vende a precios más bajos. «Hay enfermedades en diferentes épocas del año que atacan a las abejas. Los apicultores españoles no pueden sanear sus colmenas con tratamientos eficientes porque transfieren esos medicamentos a la miel. Está prohibido, pero no en países como Argentina y China, cuyas mieles también se venden en Europa», explica Séneca Martín, coordinador del proyecto de investigación Innomiel y CEO de Dinámica de Masas, una empresa de tecnología....
Una nueva e innovadora fuente de alimento, en la imagen de la izquierda, contiene todos los nutrientes que necesitan las abejas y se espera que se convierta en una potente estrategia para combatir las crecientes tasas de colapso de colonias y salvaguardar los suministros alimentarios mundiales que dependen de la polinización de las abejas.
PULLMAN, Washington — Los científicos han descubierto una nueva fuente de alimento diseñada para sustentar las colonias de abejas melíferas indefinidamente sin polen natural.
Publicada el 16 de abril en la revista Proceedings of the Royal Society B , la investigación de la Universidad Estatal de Washington y APIX Biosciences NV en Bélgica detalla ensayos exitosos en los que colonias nutricionalmente estresadas, utilizadas para la polinización de cultivos comerciales en el estado de Washington, prosperaron gracias a la nueva fuente de alimento....
Un algoritmo basado en la IA ayuda a localizar las celdas llenas de miel en las colmenas
Entrenado a base de imágenes del colmenar de la Universidad de Córdoba, presta apoyo a una tarea compleja que tradicionalmente se realiza de forma manuale abejas. / CÓRDOBA
En apicultura, la tarea de localizar en un panal las celdas que contienen crías, polen o miel es fundamental para obtener información sobre cuándo recolectar la miel o evaluar el estado de salud de la colmena. Se trata de un proceso que se realiza tradicionalmente de forma manual y cuya automatización se ha encontrado siempre con un problema: las abejas cubren con cera las superficies que contienen miel para mantenerlas en los niveles de humedad adecuados, lo que hace que pierdan su forma hexagonal característica. Esto dificulta su identificación a través de sistemas que han sido diseñados para identificar las celdas buscando formas hexagonales.
Ahora, un equipo de la Universidad de Córdoba formado por personal investigador de los departamentos de Zoología e Ingeniería Electrónica y de Computadores ha empleado inteligencia artificial sobre imágenes para desarrollar un sistema que ayude a los apicultores en esta labor. Para ello han aplicado un algoritmo de segmentación semántica de aprendizaje profundo denominado ‘Feature Pyramid Network (FPN)’ que permite realizar múltiples clasificaciones a diferentes resoluciones, ofreciendo una solución a este problema de forma robusta y automatizada.
El investigador del Departamento de Ingeniería Electrónica y de Computadores Francisco Javier Rodríguez Lozano explica que el algoritmo ha sido entrenado con distintas fotografías de panales obtenidas del colmenar de la Universidad de Córdoba y se ha comparado con diferentes algoritmos de segmentación semántica, como U-Net, y, además, con siete extractores de características diferentes.
Este trabajo, en el que participan también Francisco Javier Quiles Latorre y Manuel Ortiz López (Departamento de Ingeniería Electrónica y de Computadores) y José Manuel Flores Serrano (Departamento de Zoología), ha obtenido unos resultados de clasificación por encima del 92% en métricas típicas de segmentación de imágenes, lo que garantiza un importante apoyo a la tradicional tarea manual realizada por los apicultores, mejorando su precisión y eficiencia y reduciendo el tiempo de ejecución de esta labor.
Eduard López e Iratxe Perales, con su microscopio. Foto Emilio Fraile.
En un paseo calmado por los pasillos de Meliza, resulta difícil renunciar a todas las muestras que ofrecen los productores. Ifeza se ha convertido este fin de semana en el hogar de toda clase de mieles o de creaciones elaboradas con esta materia prima que siempre estuvo en Zamora y que ahora, además, se empieza a explotar como un recurso destacado. Ya era hora, dirán algunos. Por los distintos stands aparecen tarros con miel de Aliste, de Sayago, de La Carballeda, aunque también de otras zonas de España y Portugal, cada cual con su secreto. Cuesta decidirse.
En ese marco, resulta complejo llamar la atención cuando lo que traes no se come, sino que consiste en una máquina que sirve para distinguir si lo que te llevas a la boca o al tarro tiene unas u otras propiedades; si su calidad es la que se vende o existe alguna trampa. Con la idea de hacerse ver, a pesar de todo, han ido a Meliza Iratxe Perales y Eduard López. Su interés, además, no es que pase a su vera el consumidor, sino que se detenga el productor. Mejor aún, el miembro de una cooperativa o de una asociación.
Lo que han traído a Zamora los representantes de la empresa de ingeniería Honey.AI es un microscopio desarrollado con inteligencia artificial, «un sistema autónomo para medir la calidad de la miel», según explica Perales, que añade que, «al final, en el sector, los apicultores se gastan mucho dinero en analizar las mieles, ya sea para evitar fraudes, para caracterizar o simplemente para ver si se cumplen los requisitos del consumidor».
Lo que ocurre es que normalmente esos análisis «son complicados», se tienen que hacer en un laboratorio y no todos los productores tienen la estructura suficiente como para contar con alguien que analice las mieles: «Entonces, lo que hemos desarrollado es un microscopio que lo hace todo solo», aclara la representante de la empresa, que señala que el objetivo es vender los aparatos a colectivos de apicultores.
El microscopio de Honey.IA. Foto Emilio Fraile.
«Es una herramienta que puede usar cualquiera porque es muy fácil», asevera Perales, que indica que apenas hay que colocar la muestra, apretar un botón y esperar una hora antes de recibir un PDF con los resultados: «Te da análisis polínico, del color, la conductividad, conteo de nosema, el almidón, las levaduras, los mielatos… Al final, todo lo que se puede ver a nivel óptico te lo analiza y te lo pone de una manera muy sencilla en un documento», enumera la responsable de Honey.AI.
Perales afirma que se trata de una especie de «laboratorio en casa» para este tipo de observaciones. «Nosotros siempre decimos que hay análisis que se tienen que hacer en un laboratorio externo. Por ejemplo, el de los pesticidas, antibióticos o caracterización química, pero hay otros que los puedes hacer tú. Es tan fácil que tenemos un vídeo de un niño de diez años usándolo. Es muy sencillo», recalca la representante de la empresa.
Un precio inicial de 4.800 euros
En cuanto al precio, una máquina como esta tiene un coste de 4.800 euros, pero hay una promoción para las cooperativas que permite obtenerlo por la mitad: «Además, son temas que suelen estar subvencionados», apunta Perales, que revela que ya hay varias cooperativas y alguna empresa grande que han adquirido el microscopio, así como ciertas instituciones públicas que lo usan, como la Xunta de Galicia.
«A veces, cuesta introducir la inteligencia artificial en un sector tan tradicional, cuesta que se fíen», admite la responsable de la empresa, que entiende que el funcionamiento del microscopio irá llegando de boca en boca a los colectivos: «Poco a poco, vamos arrancando», zanja Iratxe Perales, a la espera de que se detenga ante sí alguna de esas personas que acude a Meliza para optimizar su negocio más que para probar las mieles de los demás.