España. Abejas de Mallorca para repoblar Ibiza

miércoles 28 de junio de 2017

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600.000 abejas de Mallorca para repoblar Ibiza

Su ADN es el idóneo para sobrevivir en las Pitiusas

José Miguel L. Romero Ibiza 26.06.2017 | 01:43

Cada núcleo contendrá unos dos kilos de abejas

Apicultura. La Associació d'Apicultors d'Ibiza iniciará a mediados de julio la repoblación de la isla con 600.000 abejas de Mallorca cuyo ADN se corresponde con el de los himenópteros autóctonos pitiusos, prácticamente desaparecidos desde hace 30 años. Un estudio realizado por dos expertas de la Universidad de Murcia confirma que los enjambres seleccionados en Mallorca son los ideales para recolonizar las Pitiusas.

Vía libre para la repoblación de Ibiza con abejas como las que había en la isla hasta hace 30 años, cuando el ácaro Varroa destructor casi las aniquiló. Las doctoras Pilar de la Rúa Tarin e Irene Muñoz Gabaldón, del departamento de Zoología y Antropología Física de la Universidad de Murcia, aseguran en un estudio que los himenópteros procedentes de las colonias criadas por la Agrupació de Defensa de l'Abella Autòctona de Mallorca tienen el ADN ideal para recolonizar Ibiza: son del haplotipo A1, el sublinaje africano que acabó diluido, hasta casi desaparecer, tanto por la voracidad del ácaro como por las repoblaciones realizas posteriormente con insectos alóctonos. Actualmente, en la isla solo hay un asentamiento de abejas autóctonas, apenas dos colmenas pequeñas.

El estudio fue encargado por la Associació d'Apicultors d'Ibiza, cuyo presidente, Vicent Marí, se marcó un objetivo claro en cuanto cogió sus riendas: recuperar la abeja autóctona. El informe confirmó que «el 100% de las 20 muestras» (con una decena de abejas cada una) de las colonias de la Agrupació de Defensa de l'Abella Autòctona de Mallorca contenían el ADN ideal. Se importarán «en breve» 30 núcleos desde esa isla para repoblar con ellas, poco a poco, las Pitiusas.

Cada núcleo contendrá unos dos kilos de abejas: «Hay 10.000 abejas por kilo, de manera que en cada núcleo hay unos 20.000 insectos», explica Marí. La repoblación se iniciará, pues, con 600.000 abejas mallorquinas, las pioneras de una nueva era de la apicultura ibicenca.

Llegarán en transporte marítimo. Una vez en Ibiza, se trasladarán a un recóndito lugar, ya escogido (pero que de momento Vicent Marí prefiere no desvelar), en el municipio de Sant Joan. ¿Por qué se ha elegido un paraje aislado? «Porque estas nuevas colonias han de estar lejos de otros apiarios para mantenerse puras, para que no haya peligro de contaminación por zánganos» de otras colonias.

Será el núcleo desde el que comience la recolonización: «A partir de ahí, habrá que multiplicar y repartir abejas entre los apicultores de la isla», detalla el presidente. Su objetivo es que «en cinco años se haya implantado este linaje de abejas en Ibiza». Funcionará como una especie de «granja apícola» que suministrará enjambres a los interesados. Pero no solo eso: «De paso, se usará como escuela de prácticas, para dar cursos de formación», indica Marí.

Control de importaciones

En principio, las 600.000 abejas llegarán por mar a mediados de julio, pero todo dependerá de la meteorología: «Si la temperatura es muy alta, esperaremos a otro mes más propicio. Hay riesgo de que se queden por el camino si hace mucho calor», advierte Marí.

El éxito de este proyecto, impulsado por la Associació d'Apicultors d'Ibiza, dependerá también de los propios apicultores y de que se garantice por parte de las instituciones que se vigilará y paralizará la importación de himenópteros. En ese sentido, Marí recuerda que en La Palma (Canarias) han sabido mantener la raza autóctona: «Allí ni sale ni entra nada. De ahí –explica Marí– que no tengan varroa y hayan conservado intacta su abeja autóctona. Aquí hay que hacer algo parecido. Espero que se materialicen las declaraciones de colaboración para controlar los enjambres que puedan entrar que se nos han hecho desde la conselleria insular de Agricultura». Su responsable, Miguel Vericad, alaba «la apuesta de la asociación por reforzar la estirpe de la abeja ibicenca», e incluso recuerda a los apicultores que se pueden acoger a unas líneas de ayudas de su departamento. Eso sí, advierte de que el control de las importaciones «es complicado». Pueden detectar los transportes comerciales, pero los particulares es más difícil. Y ahí llega el verdadero problema, pues muchos apicultores compran los enjambres en Internet y los reciben por correo particular. El éxito del proyecto dependerá, en buena medida, de que los propios ganaderos acaben con esta práctica y apuesten por la abeja importada desde Mallorca.