Las condiciones climáticas no acompañan y esto dificultó el normal desarrollo de las colmenas y el consecuente ingreso de néctar.
La temporada de cosecha está en pleno desarrollo en diferentes zonas del país y al respecto nuestro medio dialogó con los apicultores para tener un panorama más concreto del estado de situación.
Lejos de la ilusión generada a comienzos de la primavera tras salir fortalecidas del invierno, con pocas bajas y un futuro prometedor, hoy reina la cautela en líneas generales, debido a que el tiempo no está acompañando y que en consecuencia las perspectivas son bastante inciertas.
Buenos Aires: Como sucede en la mayoría de las temporadas, debido a su extensión la Provincia de Buenos Aires muestra un panorama bastante irregular por lo cual es muy difícil de cuantificar, sin embargo según las averiguaciones que pudo realizar nuestra redacción se puede elaborar un mapa de la situación.
La zona costera no termina de despegar, esto responde principalmente a que las temperaturas no están acompañando, con días más bien frescos y varias semanas con lluvias que indudablemente dificultan sustancialmente el acopio por parte de las abejas.
En la zona sur se han visto también perjudicados por el fío e incluso en algunos lugares como Tandil, heladas tardías.
Más hacia el centro existe un panorama algo mejor, según destacó Juan Cortázar a nuestro medio, quien indicó que por ahora las expectativas son favorables, porque existe buena floración y buena reserva de humedad, dos factores fundamentales al momento de pensar en una cosecha positiva.
Por último, viajando hacia el norte nos encontramos con una realidad poco alentadora, con muy poca entrada y consecuentemente expectativas bajas.
Santa Fe: En suelo santafesino la realidad puede dividirse claramente en dos realidades muy dispares. Por un lado en el norte, según manifestó a nuestro medio Juan Dukart, la cosecha es sumamente promisoria con promedios en la primera vuelta que estuvieron en el orden de los 25 kilos.
La floración y el clima acompañaron sustancialmente y se espera que el promedio general de toda la temporada supere claramente la media de una temporada “normal”, es decir los 35 kilos. Incluso alguno mucho más optimista indicó que la “están sacando con pala”, y que los promedios pueden ser del orden de los 50 a 60 kilos, aunque claro está todavía se debe esperar para tener una realidad mucho más concreta.
Viajando hacia el centro-sur la situación cambia radicalmente, y según resaltó Claudio Duranti la zafra será en el mejor de los casos regular y dio sus motivos al respecto. “Los días no acompañan, hay lluvias cada 48 horas y además hace bastante frío por la noche”, a lo que añadió “todo el néctar que logran recolectar se lo terminan comiendo y en consecuencia no queda prácticamente nada para extractar”.
Frente a esto, en esta zona de la Provincia se estima que los rindes estarán en el orden de los 15 a 20 kilos en el mejor de los casos, salvo que se dé un cambio sustancial que mejore rotundamente el panorama, algo que por el momento parece no ocurrirá.
Córdoba: La Provincia mediterránea está viviendo una realidad complicada en prácticamente todo el territorio y esto indudablemente genera preocupación entre los apicultores,  la cosecha de algarrobo, no fue buena y algunos no sacaron miel directamente.
Para reflejar claramente esto desde la localidad de Brinkmann, hacia el norte se habla de un atraso que podría rondar las dos o tres semanas aproximadamente. “El tiempo está muy inestable, por ahí mejora un poco pero la realidad es que en estos momentos estamos bastante complicados”, explicó María Rosa Hernández.
Lllegando para el centro el panorama es algo mejor, pero la mayoría coincide en que no será una de las mejores temporadas que se recuerde, aunque vale la salvedad que el fuerte de la cosecha arranca recién a mediados de Enero, por lo cual esto puede llegar a revertirse con un “golpe de suerte”, que por el momento no se vislumbra.
En el sur cordobés la situación sigue siendo como mínimo dispar. El frío fue para todos. La primavera, que es muy importante para la posterior cosecha fue mala, días y noches fríos. Después del temporal de frío de hace sesenta días las reinas dejaron de poner, sacaron los zánganos, en  los casos más extremos se murieron o quedaron más chicas. En algunos casos la situación no llegó a mayores porque se suplementó con azúcar (hablan de un 50% que en las perores épocas) e incluso se les suministró vitaminas.
Se perdió la nucleada, pocos pudieron reponer la mortandad del invierno.
Hay muy poca entrada de néctar, a cuenta gotas y si hace frío, nada.
Inclusive hay zonas que además del frío tienen complicaciones por la falta de agua.
Pero no todo está dicho, el verano viene en pocos días y las temperaturas van a comenzar a subir, las colmenas que estén desarrolladas van a producir después habrá que ver si alcanza para cubrir los costos expresó Javier Cersósimo.
Entre Ríos: Las complicaciones en la Provincia de Entre Ríos son de consideración y se espera una cosecha, al menos en la primera vuelta, bastante pobre donde se podría obtener en el mejor de los casos un máximo de 10 kilos por unidad.
En algunos departamentos como Gualeguaychú las lluvias hicieron estragos en los apiarios ubicados en las zonas más bajas y muchas colmenas terminaron flotando en el agua, con una importante pérdida de material vivo, pero además un atraso muy marcado justo en el momento en cual los apiarios deben estar lo más fuerte posible para comenzar a cosechar. En la zona se perdieron muchas unidades lo cual indudablemente repercutirá en los rendimientos generales que se pueden llegar a obtener en la Provincia, pero además hay que sumarle que en líneas generales la temporada viene de regular para abajo en varios departamentos.
Como ocurre cada año, las expectativas principales hacia el centro-norte están puestas en la chilca y el eucaliptos y de los promedios que se puedan obtener allá por Marzo/Abril va a depender el rendimiento general de toda la cosecha. Vale recordar al respecto que un buen año de estas floraciones representa rindes que en algunos casos pueden alcanzar hasta los 30 kilos por colmena, aunque a decir verdad esto no viene ocurriendo en las últimas temporadas.
La Pampa: La cosecha se desarrolla a ritmo lento en La Pampa, donde las condiciones climáticas todavía no acompañaron del todo y en consecuencia las colmenas no terminan de tener un ingreso fuerte de néctar, lo cual indudablemente genera cierto resquemor en los apicultores consultados por nuestro medio, quienes de todas maneras todavía mantienen las esperanzas de conseguir una zafra que al menos sea del orden de los 25 a 30 kilos de promedio.
Aquellos apicultores que llevaron sus unidades hacia el monte están con un desarrollo algo superior, aunque de todas maneras este no dio lo que se esperaba o al menos lo que puede llegar a brindar en un buen año.
El panorama es muy similar en casi todo el territorio pampeano, con algunos casos puntuales donde se está un poco mejor y otros no tanto, pero esto no dependiendo de la zona en particular, sino más bien de las estrategias de manejo llevadas adelante.
Otras regiones
Para cerrar con la recorrida, vale señalar que en la zona de monte de Tucumán había buena entrada pero a mediados de Diciembre se cortó, según resaltó Sergio Buillón al ser consultado por nuestro medio.
Por último, en Cuyo varios apicultores ya comenzaron la cosecha principalmente de Algarrobo, Lamar y algo de Alfalfa. Por ahora la entrada viene lenta pero no se detiene, lo cual siempre es un dato sumamente alentador.