Mexico. Usos de la cera de abejas: museo de cera

martes 26 de junio de 2012
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Busca museo de cera del DF dar calidad

NTRzacatecas.com
Minerva Hernández/Agencia Reforma
Martes 26 de junio de 2012

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México, DF. Seguros de que cuentan con la misma calidad que las cadenas internacionales, el Grupo Museo de Cera de México considera que los mexicanos tienen la posibilidad de ver figuras de primer nivel sin la necesidad de salir del país.

“No hay gran diferencia. Ahorita todos los museos de cera, o los que buscan calidad, están trabajando con cabello natural, con implantes oculares, estamos trabajando con dientes de porcelana y piezas bucales como las que colocaría un dentista; estamos revisando fotografías.

“El parecido (entre figura y personaje real) depende del control de calidad del taller. Hay rostros complicados porque la persona tiene una expresión difícil de captar, pero todo depende de los filtros: si de entrada vez una escultura que no se parece, no procedes al siguiente paso. Nuestra calidad es alta, sobre todo cuando tenemos la posibilidad de que la persona pose”, aseguró en entrevista Alejandra Urbina, responsable de relaciones públicas del Grupo Museo de Cera.

Para la cadena nacional que cuenta con sucursales en el DF, Guadalajara y Veracruz, el filtro más importante es que la celebridad replicada dé su visto bueno. En caso de que considere que su figura no se parece, el proceso se reinicia hasta lograr su conformidad.

En el caso de México, la cera que se usa en 100 por ciento de abeja, mientras que en el Madam Tussauds se usa la misma mezcla que usara su fundadora hace más de 200 años, la cual conjunta cera de abeja con cera de Japón, que se derrite a una temperatura más alta.

Quitando esa diferencia, Urbina indicó que el proceso de creación de la cadena internacional y la nacional es básicamente el mismo: el primer paso es hacer una escultura en plastilina, después se hace un vaciado en yeso para obtener un molde negativo de la figura en el que se vaciará la cera, y ya desmoldada se implantan a la cabeza ojos, dientes y cabello.

“El cabello que usamos es natural, se coloca a mano uno por uno, la barba también se maneja natural. Cuando tenemos una figura barbada, un compañero escultor se deja crecer la barba y él es el que la proporciona. A diferencia de museos internacionales, nosotros no elaboramos directamente las prendas, en ocasiones nos las proporciona la persona o se mandan a hacer. Ésa sería la única diferencia, que nosotros mandamos a hacer ojos, dientes y ropa, y el Madame los hace en su taller”, señaló Urbina.

Cada figura nacional, agregó, cuesta entre 300 y 500 mil pesos y requiere el trabajo de todas las personas que laboran en el taller, 15, por un tiempo que varía entre cuatro y seis meses, mientras que las del Madame Tussauds tienen una inversión de 150 mil libras (unos 3 millones 300 mil pesos) cada una.