En la localidad bonaerense de Ayacucho, un nuevo caso de muerte de colmenas por fumigaciones afectó a varias colmenas de la zona y crece el malestar entre los apicultores por un problema que lamentablemente en el último tiempo se fue convirtiendo en moneda corriente. Las pérdidas serían del orden de los 50 a 70 mil pesos. Además, según destacó Martín Robles (uno de los apicultores afectados), esto respondería a una aplicación aérea en campos de girasol.
El hecho, responde a la nueva resolución firmada por el gobierno de la provincia, en el cual –contrariamente a lo que había dictado la Suprema Corte Bonaerense en 2012, habilita a fumigar a pocos metros de localidades rurales, así como escuelas y cursos de agua. “Los dueños están fumigando. No nos informan, entonces al pasar el avión, matan todo. Hay productos que están aprobados y no matan ni la abeja, ni mariposas, ni polinizadores. Pero salen mucho más. Si nos avisaran, se podría convivir”, dijo Guillermo Landagaray, apicultor de la zona.
La resolución antes mencionada y firmada por la Gobernadora María Eugenia Vidal, generó inmediatamente que diferentes localidades de la provincia tengan intentos de regulaciones y también, casos en donde algunos municipios reducían considerablemente los metros de distancia para las fumigaciones.
Estos casos se dieron especialmente en Chascomús y Benito Juárez, en donde a contraposición de vecinos que reclamaron una regulación menos permisiva, se fallaba a favor del productor.
Sin embargo, el gobierno de la provincia avanzó con una resolución contraria. En uno de sus puntos más polémicos, el Ejecutivo permite ahora las fumigaciones hasta las 7:59 de la mañana, es decir, a tan solo un minuto del ingreso de los alumnos de las escuelas rurales.
Reunión
Para tratar este tema apicultores, se reunieron con autoridades de SENASA y Luis Igarza, responsable de Desarrollo local del Municipio, donde los vecinos plantearon la situación de poder alertar a toda la zona rural que se dé aviso cuando se fumigue para no afectar sus abejas. Igarza agregó que todos deben tener sus colmenas declaradas en la Municipalidad para poder tener un registro y avisar cuando ocurran este tipo de aplicaciones.
Para finalizar, cabe resaltar que desde SENASA se tratará de analizar las abejas afectadas para determinar el insecticida que se utilizó, donde los afectados también podrán denunciar a quién manipuló la aeronave o al propietario del campo. Y desde la Municipalidad  se solicitará a Policía de Sanidad Vegetal que interceda en este caso, aplicando la Ley que se tenga que aplicar además que investigue sobre las avionetas fumigadoras.
Ariel Guardia López
Consultado sobre el tema el responsable apícola de la Provincia manifestó que el Ministerio de Asuntos Agrarios a partir de la denuncia del productor, que además había tomado nota de la patente del avión,  participó labrando el acta de contravención correspondiente al aeroaplicador  y se lo ha hecho siguiendo la reglamentación vigente en relación a la ley de agroquímicos. Hoy está en proceso administrativo y será la dirección de Legales la que deberá expedirse sobre el tema.
El funcionario resaltó la importancia de la situación del productor damnificado  ya que se encuentra registrado tanto a nivel provincial como nacional y esto hace que desde el punto de vista jurídico se encuentre legalmente constituído.